Siempre ha existido polémica sobre de qué forma desaparecieron los dinosaurios. Nunca han existido unas bases totalmente sólidas, ya que existía la teoría de la caída de un meteorito al planeta Tierra, que puso fin a la gran mayoría de dinosaurios. Pero también se rumoreaba que fue a causa de un cambio climático, que provocó la extinción masiva de estos enormes animales prehistóricos. Pero entonces… ¿Con cual de las dos nos quedamos?
Tiene sentido la última teoría en realidad. Si apreciamos los reptiles que hay en la actualidad, se podría estimar que no hubo una extinción total de los dinosaurios, si no que solo sobrevivieron aquellos que tenían la capacidad de amoldarse a la situación de aquel momento (teoría de Darwin). En ese caso, el cambio climático podría ser una definición perfecta para desencadenar finalmente el resultado final que hoy en día todos conocemos.
Pese a este último suceso, muchos investigadores no lo tenían claro y no sabían de forma clara si la última teoría era del todo cierta. Finalmente, tras 30 años de debates e investigaciones profundas al respecto, parece que ya se ha llegado a un consenso estable sobre la teoría oficial sin más especulaciones.
Ya no hay marcha atrás. Finalmente tras varias décadas de dudas se cree conocer de manera oficial el motivo que impulsó la extinción masiva de estos gigantes reptiles: un meteorito.
Finalmente ya han encontrado los motivos y evidencias suficientes para que los investigadores piensen en esta teoría como la definitiva, aunque obviamente aún quedan científicos reticentes a ello, pero son minoría. La explicación que vamos a mostrar a continuación ya quedará latente:
El razonamiento base es que han concordado la época en la que los dinosaurios tuvieron la extinción masiva con el impacto del supuesto meteorito. Las fechas concuerdan a la perfección; hace 66 millones de años que los dinosaurios se extinguieron y la caída del meteorito, con lo que se demuestra, que las fechas cuadran en el momento álgido exacto del inicio de la extinción. Derivando con ello en causas fatales para todos los seres vivos de la tierra en ese momento y dando fin a la era del Cretácico.
Lo increíble de este fenómeno, es que siempre se ha rumoreado que un impacto de un meteorito de las dimensiones que cayó en la era del Cretácico, sería motivo suficiente como para que toda vida existente en la Tierra no sobreviviera. Pero lo curioso, es que realmente no fue así, ya que, pese esta destrucción, la vida prosperó hasta los días actuales. La vida parece que se resiste a dejar de existir, y siempre tiene un motivo para continuar su camino con fuerza y determinación.